¡PICARESCA!

Con la llegada de la venta por Internet nos hemos acostumbrado a encontrar algunos chollos.
Cupones descuento y ciertos contenidos generales y  poco específicos o poco científicos que paga la publicidad de los piensos, tales como los cuidados de las mascotas, cómo curar una rozadura o si hay que sacar a los perros con bozal, inundan la red.
Como por estas cosas no se paga, salvo las empresas para vender sus productos en prensa, radio o televisión, ciertos propietarios de mascotas están "confundidos" y quieren dejar de pagar la consulta del veterinario. Esto se traduce en dos consecuencias:

- los problemas del animal se mantienen días e incluso meses y cuando se deciden por acudir a la Clínica, ya nada tiene solución y su dueño se decide por la eutanasia e incluso por contratar el servicio funerario, que tampoco son ningún chollo y SÍ UN ATENTADO CONTRA EL BIENESTAR ANIMAL y UN DELITO, puesto que las mascotas sufren de dolor, no comen, no descansan... la enfermedad se agrava, se ha perdido el tiempo, la mascota y el dinero;

- para no gastar, el dueño de la mascota llama por teléfono no para pedir cita sino para que el veterinario le dé una solución casera con medicamentos para personas, desconociendo que la mayoría de ls veces éstos son peligrosos y que cualquier medicación en veterinaria requiere del conocimiento por parte de los profesionales expertos de qué especie, edad, peso e incluso raza se destina el producto, entre otras cosas. Y debe saberse algo obvio: que antes de un tratamiento hay que llegar al diagnóstico, cosa que es imposible porque TODOS los síntomas que tiene el animal no los identifica el propietario y se obtienen por el veterinario en la exploración física, análisis o por imagen de ecografía, rayos X etc. Y ES PRESENCIAL.

Y con esto del coronavirus ya se ha visto el efecto en el enfermo que llamando por teléfono para no molestar en los hospitales se fió del médico que les dijo que no tenía los síntomas y terminaron en el cementerio porque cuando tuvieron que ir ya no llegaron a tiempo O SE MURIERON EN CASA.

El colmo, y de ahi el título de este artículo, es que las consultas telefónicas las realice el cliente en horas intempestivas, fuera de un horario convencional e incluso de madrugada A PROPÓSITO, para ahorrar dinero,  esperando encontrar una respuesta y solución en la llamada, alegando que es muy caro, muy tarde para desplazarse, que el confinamiento lo prohíbe y otras excusas para que no les atendamos de URGENCIAS.  En resumen: PICARDÍA.